En este artículo vamos a explorar la diferencia entre dos animales que a menudo se confunden: el búfalo y el bisonte. Aunque ambos pertenecen a la familia de los bóvidos y tienen algunas similitudes en su apariencia, existen diferencias significativas en su hábitat, comportamiento y características físicas. A continuación, profundizaremos en estas diferencias para que puedas distinguir correctamente entre un búfalo y un bisonte.
¿Diferencia Entre Bufalo Y Bisonte?
Las características físicas de los bisontes y los búfalos presentan notables diferencias. En específico, los bisontes se distinguen por una joroba en la parte superior de su hombro, mientras que los búfalos carecen de ella. Asimismo, los cuernos de los bisontes son más cortos y gruesos, en contraste con los de los búfalos, que son más largos y delgados. Estas particularidades marcan la distinción entre ambas especies.
¿Por qué se llama bisonte?
Los bisontes son una especie separada, aunque están relacionados con el ganado, el gaur y el búfalo africano. De hecho, recibieron su nombre mucho antes que sus parientes vivos más cercanos. Bos primigenius, el primer animal descrito por los colonos europeos, a veces se llamaba “bisonte”. Estos mamíferos son uno de los más grandes que han existido en la tierra, con machos adultos que pueden pesar hasta dos toneladas y hembras adultas que pesan menos de la mitad. Los terneros recién nacidos pesan entre 23 y 27 kg.
A diferencia de otros animales, los bisontes forman parejas y permanecen juntos durante todo el año. Continúan apareándose durante todo el año, y las hembras quedan embarazadas durante nueve meses al año.
¿Qué tipo de animal es un bisonte?
Bison, conocidos como bisontes o cíbolos, son mamíferos artiodáctilos del género Bovidae. Actualmente, solo existen dos especies de bisontes: el bisonte americano, que habita preferentemente en las Grandes Llanuras de Estados Unidos, Canadá y México, y el bisonte europeo, que vive en los bosques de Europa del Este y se encuentra amenazado. El género Bison puede generar híbridos en cautividad con el género Bos, como el beefalo y el yakalo. Además, las dos especies del género Bison pueden cruzarse entre sí y generar individuos fértiles.
Se cree que el género Bison se originó en el sur de Asia durante el Plioceno, donde surgieron una serie de especies con formas gráciles. Estas se expandieron por el resto del continente y Europa. Durante las glaciaciones del Pleistoceno, en Asia Central, surgieron formas robustas del bisonte similares a las actuales. Al final de esta época, los bisontes saldrían desde Eurasia a colonizar América del Norte. Los cambios climáticos posteriores llevaron a la extinción de los bisontes de Asia, con la excepción del Cáucaso, donde sobrevivió una subespecie endémica hasta comienzos del siglo XX. En Europa y América, surgieron dos subespecies diferentes del bisonte: el bisonte europeo y el bisonte o búfalo americano.
El bisonte tiene cualidades físicas que le proporcionan ventajas para sobrevivir, como su voluminosa cabeza que utiliza para separar la nieve y encontrar pasto o para abrirse paso. Además, el bisonte es de los pocos animales que soporta las tormentas en lugar de huir de ellas. Esto era especialmente ventajoso cuando migraba estacionalmente largas distancias en el pasado, aunque ahora sus desplazamientos están limitados.
¿Cómo se llama el animal que se parece al búfalo?
¿Cómo son los bisontes?
El majestuoso bisonte, también conocido como “Cíbola” en el pasado, posee un pelaje marrón oscuro en invierno y marrón claro en verano. Con una altura de hasta 1,60 metros y una longitud de hasta 3 metros, su peso puede oscilar entre 450 y 1350 kg. Ambos géneros poseen pequeños cuernos curvados que utilizan para luchar durante el celo y para defenderse. Esta especie es polígama y su período de gestación dura entre 260 y 280 días, dando a luz a una sola cría que es cuidada durante un año. La madurez la alcanzan a los 3 años de edad.
El bisonte americano se encuentra en su hábitat natural de praderas abiertas o semiabiertas, así como en tierras semiáridas y matorrales. Esta especie era abundante en los territorios del norte del continente norteamericano hasta el siglo XVII y era venerada por muchas tribus nativas. La caza de este animal era vista con gran respeto y admiración por sus cualidades, y se utilizaba todo de él, desde su carne hasta su piel y excretas. El bisonte americano fue conocido como el “Dador de vida” por todos los beneficios que aportaba.
La llegada de los europeos a América trajo consigo la cacería del bisonte americano por el elevado valor de sus pieles. La matanza de miles de individuos casi lo llevó a la extinción en el siglo XIX, quedando solo 750 ejemplares hacia 1890. Gracias a la intervención del Zoológico del Bronx, se pudo restablecer la población en el Parque Nacional Yellowstone y otras reservas naturales. En la actualidad, se estima una población de bisontes de aproximadamente 350 000 ejemplares en todo el mundo.
Además, la carne de bisonte se ha vuelto popular por su bajo contenido de grasa y colesterol en comparación con la vacuna, lo que ha llevado al desarrollo del beefalo. También se han llevado a cabo esfuerzos para reintroducir al bisonte en su vida salvaje, como en México, donde el gobierno estadounidense donó crías y ejemplares para ser reintroducidos en reservas naturales. Hasta el momento, la única reserva que cuenta con bisontes en completa libertad es la reserva de “El Uno” en Janos, Chihuahua.
En conclusión, aunque a menudo se utilizan indistintamente, hay una diferencia entre búfalos y bisontes. Los búfalos son originarios de África y Asia, mientras que los bisontes son nativos de América del Norte y Europa. Además, los bisontes tienen una joroba en la parte superior de sus hombros, mientras que los búfalos no la tienen. Es importante tener en cuenta estas diferencias para poder identificar correctamente a estas dos especies de animales.
